Hola, ¿cómo estáis? Espero que hayáis pasado unas felices Navidades a pesar de la situación actual. Seguramente no habremos podido celebrar estos días como de costumbre, pero nosotros hemos decidido adaptarnos e intentar aprovecharla al máximo.
Después de dos meses sin podernos escapar, y teniendo en cuenta las recomendaciones sanitarias para estas fiestas, no teníamos muchas expectativas puestas en estas vacaciones de Navidad, aunque en nuestras mentes soñábamos con unos días de desconexión, aire puro de las montañas y pintadas de blanco. Et voilà, el destino quiso ofrecérnoslo.
Así que nos decidimos por el Valle de Arán, esperando tener suerte y que la meteorología nos regalase nieve por Navidad. El día antes de irnos con las maletas y la caravana ya preparadas las autoridades decretaron confinamiento en las zonas de la Cerdaña y el Ripollés, pero no del Valle de Arán. No os engañaré que estuvimos los 4 frente al televisor con nuestras vacaciones colgando de un hilo. Pero como os decía, parecía que todo se ponía de cara en estas vacaciones. Además, las previsiones mostraban posibilidad de nieve, y teníamos ganas de probar nuestra caravana en invierno.
Nosotros escogimos el camping Era Yerla. El camping está justo en la entrada del precioso pueblo de Artiés, a 1.100 m de altitud junto al río Garona, a tan sólo 7 km de Vielha y a 7 km de Baqueira. Nos decidimos por este alojamiento por su privilegiada situación y porque en algunos cámpings del valle cierran la zona de acampada durante el invierno. Dispone de bungalows, servicios con agua caliente, tomas de electricidad, bar, zona de barbacoas, calefacción e incluso piscina para verano. Durante los meses de invierno permanece abierto coincidiendo con la apertura de la estación de esquí de Baqueira Beret. Cuando llegamos, por la situación actual, estábamos solos en el camping, pero poco a poco fueron llegando autocaravanas y campers.
Esta vez íbamos para 15 días, así que todo nos lo tomamos con mucha calma y dejamos fluir... Nuestro día a día empieza siempre mirando por las ventanas y admirando la naturaleza que nos rodea. Valoramos mucho tener la caravana en un entorno natural privilegiado y sin mucha gente alrededor. Después, preparamos nuestros desayunos con la tranquilidad que no tenemos durante el resto del año o entre semana, y planeamos el día que tenemos por delante. Nos encanta descubrir el entorno en el que estamos, así que dejamos la caravana en el camping y con el coche vamos descubriendo en pequeños road trips. Os dejo aquí algunas de las excursiones que más nos han gustado:
Uelhs deth Joèu: en poco más de 30 minutos llegamos a un parking gratuito desde el que accedemos a esta cascada espectacular donde el agua aparece de entre medio de las rocas proveniente del glaciar del Aneto, en el valle de Benasque, después de recorrer subterráneamente más de 4 quilómetros. Se accede por una pista asfaltada pero que está cerrada en los meses de invierno por las múltiples avalanchas.
Nosotros aprovechamos para ir el primer día de estar en el valle, ya que la previsión para los siguientes era de nieve. Siguiendo la pista asfaltada, a pocos metros, encontramos el refugio dera Artiga de Lin, donde ya nos sorprendió la nieve. Si os acercáis en los meses de verano, tened en cuenta que, debido a la gran afluencia de gente, el acceso con vehículos queda restringido y hay que subir andando (unos 6 km) o con un servicio de tren turístico.
Ermita de Santa Margalida, Bagergue: situada al norte del pueblo de Bagergue, uno de los 10 pueblos más bonitos. Quizá os suena por ser la residencia de los últimos días de Pau Donés. Un lugar que desprende paz i tranquilidad a 1419 metros de altura, el más alto del Valle.
Bosque de Baricauba: a pocos quilómetros de Vielha encontramos un impresionante bosque de abetos con un àrea de picninc ideal para pasar la mañana. El acceso es gratuito y dispone de barbacoas. Más tarde nos podemos acercar a la Bassa d'Oles y terminar el día buscando ranas en el lago.
Camí de la Bruixa, Tredòs: subiendo hacia Baqueira, encontramos un pequeño pueblo que hace poco ha estrenado un sendero al lado del río con circuito lleno de sorpresas para los peques ambientado en el mundo de las brujas y la magia del bosque.
Circo de Colomers: cogiendo un desvío en la localidad de Salardú nos adentraremos en el valle d'Aiguamòg hacia el circo de Colomers. Podemos dejar el coche en el aparcamiento de Banhs de Tredòs y acercarnos a la cascada del río d'Aiguamòg y pasear por las praderas de Colomers.
Mirador de Vilamós: en el extremo occidental del Valle encontramos la pequeña localidad de Vilamós. Justo en la entrada del pueblo encontramos un pequeño sendero que nos conduce hasta el mirador. Las vistas sobre los picos del Aneto y el Maladeta son realmente sobrecogedoras.
Acostumbramos a hacer picnics en verano, pero en invierno hacemos más vida en el interior, aunque aprovechamos cuando sale un rayito de sol y bajamos el toldo para desayunar, hacer un aperitivo, comer o merendar al aire libre.
Por las tardes, jugamos a alguno de los mil juegos de mesa que siempre nos acompañan, hacemos alguna manualidad, pintamos, hacemos puzzles... optamos por no tener tv en la caravana, pero sí usamos un proyector muy sencillo para ver películas y comer palomitas pasando una tarde en familia tranquila. El invierno es una oportunidad para hacer planes diferentes, entablar conversaciones entre juego y juego y unirnos más como familia.
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